ENVIADA CON AMOR
Lugar: Noruega
Palabra
de Dios: Salmo 119:103
Brita
estaba revisando la correspondencia del día, cuando encontró un viejo sobre con
una estampilla de 0,25 kroner (equivalente a cuatro centavos de dólar). Eso era
extraño, porque enviar una carta costaba mucho más que eso. La letra en el
sobre le resultaba vagamente familiar.
“Me
pregunto de dónde salió esto”, pensó. La carta había llegado junto con un ramo
de flores. Cuando abrió el sobre, Brita se sorprendió al descubrir que la carta
era de su suegra, quien había muerto muchos años antes.
La
carta estaba fechada en septiembre de 1950. La señora Loevaas había enviado la
carta desde Oslo, Noruega. Cincuenta y cuatro años más tarde, llegó a su
destino, a unos ochenta kilómetros de distancia.
Nadie
sabe qué pasó, para que demorara tanto en llegar. Quizá la carta se atascó
detrás de una caja o se cayó detrás de un estante, en la oficina de correos.
Tal vez, uno de los empleados del correo la encontró y la entregó
inmediatamente, con un ramo de flores.
-Fue
muy lindo recibir esa carta ahora -dijo Brita.
Ella
y su familia disfrutaron leyendo acerca de las cosas de la familia que debieron
haber parecido importantes en aquel momento.
Pero,
era muy especial porque la señora Loevaas ya no estaba con ellos.
¿No
sería grandioso recibir una carta tan vieja como esa, después de muchos años?
¿Leer un mensaje especial que alguien quería que recibieras? Busca en tu casa,
y encuentra tu Biblia. ¡Es un mensaje de Dios!
Jesús
vino a la tierra hace dos mil años. Luego de su muerte y su resurrección,
regresó al cielo. Pero, él nos dejó un mensaje, su Palabra.
Unámonos
al salmista diciendo: “Cuán dulces son a mi paladar tus palabras! ¡Son más
dulces que la miel a mi boca!”.
Lecturas Devocionales para Menores 2013
En algún del Mundo
Por Helen Lee Robinson