«Envía tu luz y tu verdad,
para
que ellas me enseñen el camino»
(Salmo 43:3).
Vamos a jugar.
Imagina que es una noche oscura y que caminamos por el bosque. [Oscurezca la
habitación lo más que pueda.] Esta indicará el camino que queremos seguir.
Colocaremos esta sábana sobre nuestra cabeza para que se vea más oscuro. La luz
de esta linterna nos ayudará a no perder el camino por el bosque. [Use la
linterna para iluminar el sendero trazado por la cuerda.]
Es divertido jugar
con una linterna. La luz es útil y nos puede ayudar a encontrar nuestro camino.
La Biblia es
como una luz. En ella hay un canto que dice: «Tu palabra es una lámpara a mis
pies y una luz en mi camino» (Salmo 119: 105).
La Biblia
puede enseñarte el camino. Cuando las cosas te perezcan oscuras, es decir, que
no las entiendas o no sepas qué hacer, la Biblia puede ayudarte a saber qué
tienes que hacer. Puedes recordar las historias de Jesús y de otros personajes.
La Biblia es como una luz que puede ayudarte a tomar decisiones correctas.
Querido Jesús,
yo quiero seguir tu luz. Amén.
MEDITACIONES MATINALES PARA NIÑOS PEQUEÑOS
¿QUÉ DICE JESÚS?
Por: Rosanne C. Tetz